Esta tarta se elabora con queso Idiazábal de leche cruda de oveja latxa, curado mínimo dos meses, lo que le aporta una textura cremosa y un sabor intenso y ligeramente ahumado. La receta no requiere horno, lo que la hace ideal para preparar en cualquier época del año.
Para la base, utiliza galletas trituradas mezcladas con mantequilla derretida y presiona sobre el molde. La mezcla principal lleva queso Idiazábal crema, nata, azúcar y gelatina para lograr la textura perfecta. Deja enfriar en la nevera al menos 4 horas para que cuaje bien.
Elaboración de la compota de fresas al Limoncello
La compota aporta un contraste fresco y afrutado que equilibra el sabor fuerte del queso. Cocina fresas frescas con azúcar y un chorrito de Limoncello hasta obtener una textura suave y jugosa. Deja enfriar y sirve sobre la tarta justo antes de degustar para mantener su frescura.
Por qué elegir el queso Idiazábal para postres innovadores
El queso Idiazábal aporta un toque único a los postres gracias a su sabor ahumado y textura cremosa. Usarlo en recetas como esta tarta sin horno permite disfrutar de un postre tradicional con un giro moderno, ideal para sorprender a tus invitados con sabores auténticos y originales.
Conclusión
Esta tarta de queso Idiazábal sin horno con compota de fresas al Limoncello es una opción deliciosa y fácil para disfrutar del queso vasco en un postre innovador y lleno de sabor.